No es accidente laboral el trastorno de ansiedad tras la negativa a vacunarse contra el COVID

La STSJ del País Vasco n.º 226/2023, de 27 de junio de 2023, ECLI:ES:TSJPV:2023:1567 ha desestimado el recurso de una empleada de una residencia de mayores que solicitaba que su baja médica derivara de un accidente de trabajo tras su negativa a vacunarse contra el COVID-19. Los magistrados señalan que la consideración de accidente de trabajo solo se cumple cuando su causa exclusiva sea la ejecución del trabajo, por lo que no reconocen el supuesto de la trabajadora. 

La trabajadora padece un trastorno de ansiedad después de que la empresa adoptase medidas para preservar la salud de los usuarios del centro y del resto de operarios —«(...) la empresa toma medidas de racionalidad como lo es la de retirar su actividad en determinados ambitos y aspectos para seguridad de sus residentes y compañeros de trabajo, y además la da los elementos preventivos para el COVID, mascarilla FFP2, bata de plástico y pantalla. Ello no es medida humillante, y en nada existe nexo causal entre esto y el proceso de IT.)»—. Para ello, destinaron a la empleada a zonas menos confluidas, dándole instrucciones de utilizar equipos de protección individual.

Según el recurso presentado, la causa única de la patología de la trabajadora deriva del trabajo, como consecuencia de la presión jerárquica y constante que ha tenido que vivir ante su decisión de no vacunarse. Sin embargo, la Sala Social del TSJ del País Vasco considera que la única causalidad entre el trabajo y el trastorno no es suficiente para que esta baja sea considerada como accidente de trabajo. 

La trabajadora había manifestado que antes de la vacunación en su centro no había sufrido ninguna patología previa. El INSS, mediante una resolución dictada el 16 de agosto de 2021, declaró que el proceso de incapacidad temporal se debía a contingencia común, y el juzgado de lo Social de Donosti confirmó posteriormente esta decisión. 

El Tribunal Superior de Justicia del País Vasco es categórico al indicar que para que una patología pueda merecer la calificación de accidente de trabajo no basta con que esté relacionada de manera directa con la actividad laboral, sino que es indispensable que derive únicamente del ejercicio profesional, excluyéndose aquellos supuestos en que hayan podido interactuar otros agentes. Por lo tanto, no se reconoce el supuesto presentado por la trabajadora de la residencia.

«Efectivamente la situación de IT que padece la recurrente va unida al rechazo a la vacuna y las medidas preventivas que obligatoriamente tiene que disponer la empresa conforme lo prevén los arts. 15 y siguientes de la LPRL, pero ni el entorno ni las circunstancias de la relación laboral nos concitan que solo estas exigencias de prevención dispuestas por la empresa hayan influido de forma directa en la patología descrita y por ello debemos desestimar el recurso de suplicación».

Supuestos excluidos de la consideración de accidente laboral