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El INSST publica directrices a los ayuntamientos para la retirada del amianto instalado
El INSST publica una guía metodológica para que los ayuntamientos elaboren un censo de instalaciones y emplazamientos con amianto incluyendo un calendario que planifique su retirada.
El Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST) ha publicado una guía metodológica no vinculante dirigida a los ayuntamientos para la elaboración de censos municipales de amianto, en cumplimiento de la D.A. 14.ª de la Ley 7/2022, de 8 de abril, de residuos y suelos contaminados para una economía circular.
«En el plazo de un año desde la entrada en vigor de la ley, los ayuntamientos elaborarán un censo de instalaciones y emplazamientos con amianto incluyendo un calendario que planifique su retirada. Tanto el censo como el calendario, que tendrán carácter público, serán remitidos a las autoridades sanitarias, medioambientales y laborales competentes de las comunidades autónomas, las cuales deberán inspeccionar para verificar, respectivamente, que se han retirado y enviado a un gestor autorizado. Esa retirada priorizará las instalaciones y emplazamientos atendiendo a su grado de peligrosidad y exposición a la población más vulnerable. En todo caso las instalaciones o emplazamientos de carácter público con mayor riesgo deberán estar gestionadas antes de 2028».
Esta guía se mantendrá vigente hasta la aprobación de nuevos reglamentos normativos que desarrollen dicha disposición.
Las directrices están dirigidas a los ayuntamientos, técnicos municipales, servicios de prevención y otros profesionales del sector de la construcción. Se enfatiza la necesidad de contar con personal capacitado y con experiencia en la identificación y valoración del
Procedimiento para la elaboración del censo
Teniendo en cuenta que la normativa obliga a la inclusión en el censo de todos los emplazamientos e instalaciones con amianto, la elaboración del censo va a ser una tarea compleja que debe ser realizada por personal con formación y experiencia adecuada.
Fase de exploración
La primera etapa consiste en obtener una relación de emplazamientos e instalaciones con amianto o con alta probabilidad de contenerlo, basándose en la cronología de construcción y uso de los edificios. Se recopilará toda la información disponible sobre los edificios, incluyendo fechas de construcción y rehabilitación, uso original y actual, características físicas y ubicación.
Fase de inspección
En esta fase se realiza el trabajo de campo para confirmar la presencia de amianto mediante inspección visual y toma de muestras. Se recomienda seguir una sistemática de inspección detallada para asegurar que todas las áreas sean revisadas adecuadamente.
Valoración del riesgo
La valoración del riesgo asociado a cada MCA es crucial para determinar la peligrosidad y planificar su retirada. Se consideran factores como el tipo de amianto, estado de conservación, accesibilidad, actividad en la zona y otros que puedan influir en la liberación de fibras de amianto.
Gestión de residuos
La gestión de los residuos de amianto debe cumplir con el
Priorización de la retirada
La priorización de la retirada de amianto debe basarse en el grado de peligrosidad y la exposición de la población más vulnerable. Se recomienda comenzar por instalaciones sanitarias, centros educativos y otros lugares con alta afluencia de personas.