Sentencia Penal Nº 80, Audiencia Provincial de A Coruña, Rec 554/98 de 12 de Mayo de 1998

El delito de conducci6n bajo la influencia de bebidas alcohólicas del art. 340 bis a 10) del C. Penal, no se trata de un delito formal, ni se comete porque el conductor tenga un grado de hemoconcentraci6n alcohólica determinado, se trata de un delito de riesgo abstracto, en el que se protege la seguridad del tráfico viario; por ello, es la influencia negativa del alcohol en el conductor, al producir una merma en sus facultades psícofisicas, con el perjuicio que ello conlleva, la que debe valorarse en cada caso concreto, valiéndose de unos elementos de prueba, entre los que hallamos el grado de hemoconcentración alcohólica, que no es lo constitutivo del delito sino el instrumento probatorio, pero con ser este instrumento el importante, no tiene carácter excluyente frente a los otros elementos de juicio también importantes, como son los signos externos o sintomatólogicos que presente, bien para corroborar el anterior o bien para suplirlo cuando éste falte, de manera que esa influencia negativa puede quedar probada perfectamente, cuando los signos externos del sujeto son suficientemente elocuentes. Se estima el recurso.