Sentencia Penal Nº 75, Audiencia Provincial de A Coruña, Rec 726 de 10 de Noviembre de 2000

PROCEDIMIENTO ORDINARIO Y DELITO DE LESIONES El acusado hallándose en estado de intoxicación alcohólica que limitaba sus facultades intelectivas y volitivas, intervino en una conversación que sostenían el denunciante y otro, propinándole un puñetazo la nariz, siendo separado y alejándose, aunque regresó portando una copa de cristal que estrelló en el rostro del denunciante, quien resultó con múltiples heridas que causaron la pérdida total de visión por ese ojo. Ese mismo día el procesado, cuando aún no se habían denunciado los hechos, se personó en el puesto de la Guardia Civil y proporcionó su domicilio. El acusado resarció con tres millones de pesetas a la víctima, quien renunció cualquier otra indemnización. Los hechos son constitutivos de un delito de lesiones, por cuanto que, concurrente el "animus laedendi", integrante del dolo genérico, el sujeto activo provocó la pérdida de un ojo, jurisprudencialmente equiparada a la pérdida funcional y parcial de visión. En la ejecución de dicho delito es de apreciar la atenuante analógica de embriaguez, hay que tener en cuenta también que el compensó económicamente y con anterioridad a la celebración del juicio a la víctima, pese a constar su insolvencia patrimonial. Así como considerar la atenuante analógica de confesión.