Sentencia Penal Nº 15/2003, Audiencia Provincial de Pamplona, Rec 80/2002 de 05 de Febrero de 2003

No solamente ha sido probada la forma anómala en que el conductor pilotaba su vehículo, sino también la influencia que las bebidas alcohólicas que había tomado tuvieron sobre el mismo, ya que no sólo dio positivo en la prueba de alcoholemia que le fue practicada, sino que además presentaba evidentes síntomas de estar influenciado por la ingestión de bebidas alcohólicas tal y como resulta de la prueba testifical practicada, en la que el agente de la Policía Municipal se ratificó en los síntomas contenidos en el atestado y afirmó que se procedió a practicarle la prueba por ir claramente influenciado, sin que se aprecie contradicción entre lo manifestado en el atestado y lo depuesto en el acto del juicio oral. Así las cosas parece suficientemente probado que el acusado condujo su vehículo influenciado por las bebidas alcohólicas que había tomado y que tal influencia era apreciable en la forma en que condujo su vehículo, creando un riesgo para sí mismo y para el resto de los usuarios de la vía pública.