Sentencia Penal Nº 134, Audiencia Provincial de A Coruña, Rec 47 de 20 de Julio de 2000

La sentencia apelada contiene una amplia fundamentación tanto fáctica o probatoria como jurídica. Es cierto que las únicas pruebas legitimas, salvo excepciones muy justificadas, son las practicadas en el juicio oral y que las manifestaciones contenidas en un atestado policial carecen de valor probatorio si no son ratificadas en el juicio oral por sus autores (prueba testifical). Se trata de una prueba perfectamente valorable.Y todo ese conjunto, además de la imparcialidad del guardia civil, sin relación alguna con el acusado, a diferencia de los otros testigos, es lo que avala otorgarle la credibilidad que se expresa en la sentencia apelada.Ante los signos e indicios de influencia alcohólica en el acusado, era legítima la orden de someterle a la prueba de detección y, dada su contumaz negativa, ya de palabra ya por su comportamiento negativo, no obstante las advertencias que se le hicieron, cometió igualmente el delito de desobediencia objeto de condena.Se desestima el recurso.