Sentencia Penal Nº 100, Audiencia Provincial de A Coruña, Rec 518 de 30 de Mayo de 2000

Cuando se aduce que la víctima no intentó probar la existencia del dinero y otros hechos, se olvida que la declaración de aquélla es, conforme a jurisprudencia reiterada y tan notoria que excusa la cita, prueba de cargo válida para vencerla presunción de inocencia y no hay razón que induzca a poner en cuestión su veracidad, que apreció quien la recibió con sujeción a los principios -de inmediación, oralidad y contradicción, tanto más que reúne las notas da persistencia, congruencia interna y -falta de animosidad previa, reconocida ésta por el propio apelante al ser oído en él Juzgado de Instrucción, y el acusado, que empezó con una negación absoluta y acabó admitiendo su presencia en la casa y haber recibido un golpe en la cabeza propinado por el testigo, muestra una memoria curiosamente selectiva, al no acordarse de cómo y por qué entró en la casa ni si sangraba por la herida y en cambio, recordar que- no cogió el dinero ni amenazó con el cuchillo, ni llevaba puesto un casco. Se desestima el recurso.