Sentencia Civil Audiencia Provincial de Pontevedra, Rec 0089/98 de 15 de Septiembre de 1998

Es indiscutible el planteamiento que expone la parte apelada, siguiendo la Jurisprudencia del Tribunal Supremo, de que las tercerías de dominio basadas en un documento privado de compraventa exigen una demostración seria, eficaz, fehaciente, que no deje lugar a ninguna duda sobre la fijación del precio y su efectiva entrega, con el fin de evitar posibles confabulaciones entre tercerista y ejecutado. Existe un titulo, el contrato privado de fecha 18 de septiembre de 1995 y se justifica la posesión del vehículo por el comprador, quien encarga su peritación y su reparación en un taller, cuya factura abona, como ratifican en juicio tanto el perito como el representante del taller, en referencia a fecha intermedias entre aquel contrato y el embargo litigioso. En consecuencia procede estimar el recurso y con él la demanda inicial para estimar la tercería de dominio, con imposición de las costas de primera instancia al demandado que se ha opuesto a la demanda (art. 523 LEC) y sin hacer expreso pronunciamiento sobre las del recurso, dada su estimación (art. 710 LEC). Se estima el recurso.