Sentencia Civil Audiencia Provincial de A Coruña, Rec 404 de 22 de Mayo de 2000

En el acto de la vista la parte recurrente volvió a insistir en que existió un contrato de compraventa de acciones de la empresa "Di..S.A." en el que uno de los compradores era el propio demandante, socio de la entidad vendedora "Sa..y Cía S.A., y la prueba de ello devenía del acta de la Junta General Ordinaria de 28 de junio de 1996 en la que se hizo constar la anulación anterior del acuerdo de venta de aquellas participaciones, así como los recibos de los pagos a cuenta efectuados por el adquiriente, por importe de 100.000 pts; sin embargo, y tal y como se expresa en la sentencia apelada, la parte actora no acreditó cuando se perfeccionó el contrato de compraventa ni si concurrieron los requisitos que exige el art. 1261 del Código Civil, pues ni se sabe la fecha del acuerdo, ni cuando éste iba a ser efectivo, ni tampoco el precio de adquisición de las participaciones sociales, ya que la entrega a cuenta de distintas cantidades no presupone que éstas constituyan la totalidad de aquel precio. Si a ello se añade que, aunque fuese real y firme el acuerdo de la compraventa, al estar supeditada la transmisión a las exigencias del art. 20 de la Ley de Sociedades de Responsabilidad Limitada, aquel acuerdo podía ser inviable por los derechos de tanteo de los socios o de la propia sociedad, se llega a la conclusión de que tal compromiso de venta no engendraba obligaciones inmediatas para los contratantes, siendo, por tanto, más lógica la tesis sostenida por la entidad demandada sobre la informalidad el acuerdo que luego, del mismo modo, se anuló, con lo cual a los supuestos adquirientes de las participaciones se les devolvió el dinero entregado a cuenta, siendo el demandante el único que se negó a aceptar el reintegro.Se desestima el recurso.