Sentencia Administrativo Nº 128/2003, Tribunal Superior de Justicia de La Rioja, Sala de lo Contencioso, Rec 83/2001 de 21 de Marzo de 2003

Desestima el TSJ la impugnación del acuerdo mediante el que se aprobó el "pliego de condiciones para contratar la enajenación de aprovechamientos urbanísticos con destino a la instalación de un centro comercial". De lo expuesto resulta que tanto los bienes del patrimonio municipal del suelo (los terrenos) como su equivalente económico, deben ser destinados a la conservación y ampliación del mismo, ajustándose a los fines legalmente establecidos. Debe distinguirse por lo tanto entre el destino de los terrenos del citado patrimonio separado cuando se incorporan al proceso urbanizador, "de acuerdo con el planeamiento urbanístico" de las finalidades del patrimonio municipal del suelo previstas en el art. 164 L 10/1998, que contempla todo el patrimonio separado: terrenos y dinero o equivalente económico. Así, cuando los terrenos de dicho patrimonio no puedan según el planeamiento aprobado ser destinados a "viviendas de protección pública o a usos de conservación o mejora del medio ambiente o a otros usos de interés social", por prever dicho planeamiento otros usos diferentes, aún cabe la posibilidad de destinar "los ingresos obtenidos mediante la enajenación de terrenos o sustitución del aprovechamiento correspondiente al Ayuntamiento por su equivalente económico" a la conservación y ampliación del patrimonio municipal del suelo. En el caso litigioso esto es lo que ha sucedido.