Sentencia Administrativo Nº 1/2004, Tribunal Superior de Justicia de Canarias, Sala de lo Contencioso, Sección 2, Rec 38/2004 de 19 de Julio de 2004

El TSJ desestima el recurso contencioso-administrativo interpuesto por el recurrente, contra la aprobación definitiva de las Normas Subsidiarias de Planeamiento del Municipio en cuestión. Entiende la Sala que el texto aprobado por el Ayuntamiento, en efecto, varía en relación al texto sugerido por la Comisión de Urbanismo, pero se trata del ejercicio de una competencia municipal en materia de actividades clasificadas. Los Ayuntamientos pueden, en ejercicio de sus competencias, establecer en sus Planes de Ordenación y en sus Ordenanzas, las condiciones de construcciones e instalaciones en suelo rústico, además del respeto que deben a la legislación sectorial. La competencia municipal, que alcanza incluso a prohibir dichas actividades molestas comprende la posibilidad de regular las condiciones de su establecimiento y funcionamiento, pues en definitiva son los planes los que configuran el derecho de propiedad sobre el suelo, y no siendo estas normas inmutables, pese a su vigencia indefinida, no cabe esgrimir el mantenimiento de una situación precedente, sin perjuicio de los derechos que pueda tener su titular, por lo que la situación de la granja, preexistente al Plan, aun si estuviese legalizada, no puede alegarse como obstáculo para que el Ayuntamiento regule la ubicación de actividades molestas en suelo rústico, pretendiendo con ello cohonestar los intereses de sus titulares con el de los vecinos.